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sábado, 8 de marzo de 2014

RECORDANDO A UN BUEN MATADOR DE TOROS.

Gregorio Sanchez, Matador de Toros.
Gregorio Lozano Sánchez “Gregorio Sánchez”, nació en Santa Olalla (Toledo) el 8 de agosto de 1930, en su ciudad natal comienza a torear en novilladas sin picadores en 1948, hasta que el 15 de octubre de 1952 en la plaza de toros de Guadalajara debutó con picadores lidiando cinco novillos de Luciano Cobaleda y uno de Batanejos, llevando como alternantes a Manuel Sevilla y a Lorenzo Girao “Morenito de Córdoba”. Se presenta en el coso de Carabanchel de Vista Alegre de Madrid el 5 de julio de 1953 lidiando novillos de Abdón Alonso y teniendo como compañeros al mexicano Fernando de los Reyes “El Callao” y José Barroso. El 8 de agosto de 1954 se presentó en la plaza de toros de Madrid en la que alterna con Luis Díaz y José Rivas, para lidiar novillos de Rodríguez Santana y tras una buena campaña como novillero en 1955, toma la alternativa el 1 de abril de 1956 en la plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, de manos de Antonio Bienvenida, y como testigo el mexicano Joselito Huerta con toros de la ganadería de Joaquín Buendía. El 14 de junio del mismo año, hace su presentación en la plaza madrileña de “Las Ventas”, para confirmar su alternativa, llevando como padrino a César Girón y como testigo a Alfonso Merino lidiando toros de Antonio Pérez. En 18 años como matador de toros, Gregorio Sánchez fue dos veces líder del escalafón de los matadores de toros, en 1957 participando en 73 corridas de toros y en 1958 en 87. Fue apoderado por: Juan Ramos, Emilio Fernández, “Camará” y Pepe Ordóñez. Cabe destacar su presencia en la corrida goyesca de Ronda (Málaga) en la edición de 1966, en la que alternó con Antonio Ordóñez y Fermín Murillo para ldiar toros de la ganadería salmantina de Montalvo. Se retiró del toreo activo en Madrid, el 30 de septiembre de 1973 encerrándose con seis toros de Manuel García Aleas, tras su retirada, no volvió a vestirse de luces, solo actuó continuamente en festivales benéficos. En siete ocasiones salió este diestro toledano por la puerta grande de Madrid. El desaparecido crítico Vicente Zabala resumía su trayectoria con estas palabras: "Si en sus comienzos se caracterizó por un toreo valiente y esforzado, se fue transformando paulatinamente en un artista sobrio, eficaz y buen lidiador". Fue profesor de la Escuela de Tauromaquia de Madrid. Informó para Sabiendo de toros: JAIME MONTOYA ESCAMILLA, DESDE MEXICO.

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