SABIENDO DE TOROS POR ANGEL Y GLORIA

LOS ESPONTANEOS EN LOS RUEDOS DE LAS PLAZAS DE TOROS YA DESAPARECIERON, HOY EXISTEN ESCUELAS SI, PERO ANTES SE FORJABAN A SANCHE Y FUEGO, POR ESO EXISTIAN TOREROS DE MAS CASTA.

La figura del espontáneo forma parte de la historia del toreo, y algunos de los más famosos del último medio siglo son parte de la historia del mismo torero: Manuel Benítez Pérez "El Renco" posteriormente apodado "El Cordobés", se lanzó en las plazas de Córdoba, Madrid y Aranjuez, en el año de 1957, cuando era un mísero maletilla. En la de Madrid, fue revolcado cruelmente por el toro, frente al burladero del tendido 6, milagrosamente, sin sufrir cornada. En la de Aranjuez, su foto, conducido preso por dos guardia civiles en el callejón de la plaza, hace parte, ya, de la historia del toreo. Miguel Mateo "Miguelín", siendo matador de alternativa, el 18 de mayo de 1968, se lanzó en Las Ventas, a un toro de Manuel Benítez "El Cordobés". Recibiendo como sanción multa y prohibición de actuar en la corrida del día siguiente para la cual estaba anunciado. Fernando Eles Villaroel, quien el 14 de septiembre de 1981, se lanzó en la plaza de Albacete, al quinto toro de la corrida: "Sospechoso" de Los Guateles, correspondiente a Manuel Benítez "El Cordobés" siendo muerto de una cornada en el cuello. Desgracia esta que, dicen, motivó el retiro (casi) definitivo del matador de Palma del Río. Al espontáneo le anima la pasión por el toreo, una pasión de alguna forma reprimida: bien sea la del pobre maletilla en busca de una negada oportunidad como Manuel Benítez, la del torero en protesta por un trato injusto y discriminatorio, como "Miguelín", o la del aficionado que no se resigna al pasivo papel de espectador y quiere ser protagonista aunque sea lo último que haga en la vida, como el malogrado Fernando Eles. No son convenientes al espectáculo los espontáneos, es cierto, pero los aficionados de todos los tiempos los hemos comprendido y mirado con simpatía porque la corrida es mucho más que un espectáculo.